Dos trabajos publicados recientemente sugieren que utilizar la bicicleta habitualmente para el ocio y el transporte podría ayudar a reducir el riesgo cardiovascular. Esta medida podría ser una importante estrategia de prevención de salud pública en muchos países, con el objetivo de reducir el riesgo cardiovascular. En ambos casos se trata de estudios con una muestra de personas considerablemente amplia y con periodos de análisis y estudio prolongados para que los datos obtenidos y las conclusiones pertinentes tengan una mayor fiabilidad.
El primer estudio* contó con la participación de 45.000 personas danesas de entre 50 y 65 años que utilizaban la bicicleta para el ocio o el transporte. Según los resultados tras un seguimiento de 20 años, los participantes padecieron menos infartos que la media. En concreto, entre un 11 y un 18% menos. Los investigadores del segundo estudio**, realizaron un seguimiento durante más de 10 años a más de 20.000 personas de nacionalidad sueca con edades entre los 40 años y los 60 años, y evaluaron sus hábitos de desplazamiento, su peso, los niveles de colesterol, la glucosa en sangre y la presión arterial. El análisis de los datos demuestra que los adultos suecos de edad media y avanzada que iban en bicicleta al trabajo en los diez años de seguimiento del estudio, presentaban un riesgo un 39% menor de obesidad, un 11% menos de riesgo de presión arterial alta, un 20% menos de riesgo de colesterol alto y un 18% menos de riesgo de diabetes. Los resultados de ambos estudios indican que el uso de la bicicleta como medio de transporte conlleva un fuerte efecto cardioprotector. La buena noticia es que nunca es demasiado tarde para beneficiarse de un estilo de vida activo. Con los datos obtenidos en los dos estudios podemos afirmar que, como parte de la prevención del riesgo cardiovascular, se debería considerar la promoción de la bicicleta como medio de transporte. Las autoridades de salud pública, los gobiernos y los empresarios deberían considerar iniciativas que promuevan montar en bici como forma de apoyar las iniciativas de prevención de la enfermedad cardiovascular a gran escala.
Bibliografía * Prospective Study of Bicycling and Risk of Coronary Heart Disease in Danish Men and Women. Kim Blond, Majken K. Jensen, Martin G. Rasmussen, Kim Overvad, Anne Tjønneland, Lars Østergaard and Anders Grøntved Circulation. 2016;134:1409-1411, originally published October 31, 2016 ** Bicycling to Work and Primordial Prevention of Cardiovascular Risk: A Cohort Study Among Swedish Men and Women, Anders Grøntved, Robert W. Koivula, Ingegerd Johansson, Patrik Wennberg, Lars Østergaard, Göran Hallmans, Frida Renström, Paul W. Franks, Journal of the American Heart Association. 2016;5:e004413, originally published October 31, 2016 Artículo elaborado por la doctora Petra Sanz Mayordomo, miembro del Consejo de Expertos de la Fundación Española del Corazón y directora médico del Hospital Universitario de Móstoles (Madrid).
Fuente: Fundación Española del Corazón