Si su corazón no bombea sangre suficiente para abastecer su cuerpo, eso es una insuficiencia cardiaca. Seguir estos consejos de vida sana, además de la toma de los fármacos indicados por su médico, harán que mejore de su dolencia.
1. Siga las recomendaciones de su cardiólogo y de su médico de cabecera
Consulte con ellos cualquier duda que le surja sobre sus síntomas y su tratamiento. Acuda a las consultas y revisiones programadas. Recuerde que la insuficiencia cardiaca es una enfermedad grave y que sus médicos son los que mejor conocen cómo tratarla.
2. Siga a rajatabla el tratamiento
No lo suspenda por su cuenta sin haberlo consultado con su médico de cabecera o su cardiólogo. Si tiene dudas, consúltelos. Recuerde que abandonar el tratamiento, aunque sea por poco tiempo, puede descompensar su insuficiencia cardiaca, lo que le llevará al hospital.
3. Haga una vida sana
No debe fumar ni ingerir bebidas alcohólicas. Haga ejercicio físico de forma regular y moderada (el mejor es un paseo suave). No tome comidas con excesiva sal. Mantenga su peso o adelgace si tiene sobrepeso. Controle de cerca su tensión arterial. Estas recomendaciones ayudan a mejorar su calidad de vida y el pronóstico de su enfermedad.
4. Controle a diario su peso y diuresis
Si observa un relevante aumento de peso en pocos días o que se le hinchan los tobillos, o que la diuresis (la cantidad de orina expulsada) disminuye, puede aumentar la dosis del diurético durante unos días, hasta que mejore el problema, para volver después a su dosis habitual. En todo caso, consulte lo antes posible con su médico ante estos síntomas de alarma.
5. Vigile qué otros fármacos toma
Evite medicamentos que descompensen su insuficiencia cardiaca, sobre todo antiinflamatorios y corticoides. Si tiene dolores reumáticos o de otro tipo es preferible tomar analgésicos, como paracetamol o metamizol. Si duda, consulte al médico.
Fuente: Fundación Española del Corazón